Los tanques de abonado o tanques fertilizadores son un sistema de fertilización mediante la inyección de fertilizante en el agua de riego.
Para el uso de un tanque de abonado debemos desviar una parte del flujo de agua mediante una válvula de estrangulamiento y lo haremos circular por nuestro tanque. Este tanque se encuentra lleno del producto que pretendemos dosificar.
Este es un sistema de fácil instalación y bajo coste pero que presenta grandes inconvenientes como una mezcla poco homogénea del producto a dosificar. A medida que el agua de riego circula por el tanque la disolución que hay en su interior se ha ido empobreciendo y se hace imposible garantizar esa homogeneidad en el reparto de nutrientes.
Aparte de eso es un sistema que presenta problemas técnicos que no permiten, o que lo hacen inadecuado, para la fertilización de diferentes sectores; es difícilmente automatizable y que durante su uso se produce una pérdida de carga. Es por ello por lo
que es mucho más recomendable el uso de equipos más tecnificados, como las bombas dosificadoras, que permiten una mayor precisión en el aporte de fertilizantes y garantizan la homogeneidad del reparto de los nutrientes.
